Cava de Volonte - Córdoba

Fuimos dos parejas, antes de cenar nos invitaron a bajar a la cava para degustar vino y unos aperitivos, todo estaba delicioso.La comida fue muy rica, la atención muy buena. La decoración muy bonita

Fuimos con mucha expectativa, nos volvimos decepcionados.El lugar esta muy bien ambientado, se nota una gran inversión en mobiliario, adornos y vajilla. La cava esta bien presentada y la degustación es casi imposible de llevarla a cabo si hay mas de dos personas en la misma por lo pequeño del lugar en donde se sirven el paté, los tomates confitados y la pasta de berenjena. La carta se presenta muy pretenciosa con platos innovadores pero que en la realidad no son mas que inventos poco desarrollados. La atención, PÉSIMA, fuimos un viernes a las 21.30 hs, en el lugar había, en ese momento, dos mesas ocupadas y en la puerta 4 o 5 Mozos, nos ubicamos en una mesa para dos, el Mozo nos trae la Carta y al no poder responder las dos o tres preguntas básicas que le hicimos como por ej. "hoy hay menú de 7 pasos ? o "se puede bajar a la cava ?.." se sinceró y nos dijo que era su primer noche en el lugar y no tenia idea ni de la carta, ni del estilo del lugar, ni siquiera sabía que gustos de helado había....mucho menos sabía como salían los Malfatti ni la salsa de un plato con pollo. O sea, cada pregunta que hacíamos, tenia que volver a preguntar a la cocina, al Encargado o no se a quien. Para terminar esta mala experiencia, cuando pido la cuenta, el Mozo me trae la misma y era una Nota de pedido o algo parecido que claramente decía "NO VALIDO COMO FACTURA", me recibe la tarjeta y me dice que se cobra un 10 % extra por pago con Tarjeta de Crédito, dejando la sensación de ser unos improvisados y de no importarles mucho estar encuadrados en las normativas vigentes en cuanto a facturación. Obviamente no vuelvo más.

Fuimos con altas expectativas, lamentablemente no se vieron satisfechas. Pedimos un plato con cabrito y otro con conejo. Ambos dejaron bastante q desear, el cabrito sin brillo ni jugos. El conejo llego tibio tirando a frio. Solo rescato los ravioles que son la guarnición del cabrito. Cuando se colman las mesas el ruido es importante. La visita a la cava tiene un anfitrión agradable y bien dispuesto. Lástima q no cuidan el detalle de q las cazuelas q te invitan tengan contenido.

Es un restaurant gourmet, bastante amplio y de buen diseño. Se ofrece opción de bajar a visitar la cava (que es amplia pero incómoda para acercarse a degustar apetizers cuando hay más de 2 o 3 personas).La carta esta muy bien, tiene un plato de cada tipo. La comida es muy gustosa y está más que bien presentada. Las porciones son normales. Los precios bastante altos. Es muy recomendable .

Estaba intrigado con el lugar y allá fuimos en una noche con amigos. Está buena la bajada a la cava, con asesoramiento en vinos y una degustación de escabeches, como para hacer más distendida la espera de los platos. La carta es variada y completa. Los platos exquisitos. Los tragos muy bien preparados. Como para volver