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Írjon visszajelzéstPequeño establecimiento ubicado en Plaza Comercial, cuenta con espacio propio con sillas y mesas, muy bien adornado, se cuida en su presentación, y también cuenta con las mesas comunes que todas las zonas de restaurantes de las plazas tienen, obviamente si accedes a su espacio propio nadamás te piden que no metas nada de alimentos o bebidas ajeno a ellos, lo cual es comprensible. Fuimos un Lunes, en la tardecita, por lo que como todos los negocios no hay mucha gente y movimiento, desconozco como sea la atención y la espera en fines de semana o en días fuertes y horarios ya más nocturnos, se que se quejan mucho del tiempo, pero en nuestra visita no demoró mucho como en los comentarios marcan, pero tomen en cuenta el día y el horario. Mi primera impresión negativa fue ver qué llegando no había un menú grande o algo así para darnos una idea, pedimos lo único que se mostraba, lo cual era un pizarrón pequeño plegable en la forma triangular de los señalamientos de piso mojado, y en el pizarrón marcaba en gis una promoción de 3 hamburguesas x $129 o algo así, lo cual fue lo único que se ordenó, 2 de esos y unas papas fritas familiares. No sé nos presentó carta o algo, solo cuando ya estábamos sentados la única joven que ví atendiendo nos preguntó si queríamos algo de beber pero aún así no nos ofreció carta o algo para ver qué bebidas habían. La segunda impresión negativa fue a la hora de cobrar, nos cobraron primero y después nos sirvieron, eso ni en los puestos de la calle memelas, cemitas, etc... se hace, no sé si fue un error de comunicación o algo, que se entendió que era para llevar o algo así, pero si uno como cliente está preguntando por sentarse en sus sillas propias pues creo que se entiende que vas a comer en el lugar, a saber, igual pobre chica, estaba sola, ojalá no sea solo ella en los fines de semana, sería muy agobiante. La comida muy rica, las papas venían con un queso derretido, buenas de sabor y cocción, pero el tamaño familiar sorprende, no eran tan grandes como su nombre, pero no sé puede juzgar mucho de tamaños o algo si desde el inicio no se mostró una carta para saber más estilos, tamaños o algo más. Las hamburguesas muy ricas, la carne a mi gusto faltó de poca sal no había saleros , el pan muy bien cuidado, el sabor en general muy rico, se notaban ingredientes frescos, pero al abrir la hamburguesa, se nota como solo son embarradas de un lado y el otro lado se queda seco. Solo dan un bote de catsup medio vacío, como con 20% de catsup y una salsa a la mitad como al 50%, y éramos 5 personas. La catsup de milagro alcanzó para las papas y las hamburguesas de todos, pero pobre del que vaya después de nosotros, le tocó una catsup al 5% : y su salsa no se probó, olía rancia, muy mal cuidado los aderezos extras de sobremesa. Google dice que hay baños, pero yo no vi baños, nadamás un lavabo para limpiarte las manos, y está muy bien cuidado. En general se agradece que exista un espacio propio del restaurantito para poder degustar, cuentan con televisor y se escucha bien lo que esté reproduciendo, la ambientación está bien cuidada y la limpieza también, espacio familiar.
Es la segunda vez que voy. Es económico pero no por eso descuidan el sabor y la calidad (el combo de vikingas es mi favorito). El tiempo de espera podría ser un inconveniente para algunos pero se debe a que todo lo preparan al momento y en verdad que vale la pena esperar .
Las mejores de la zona. Precio-calidad 10/10