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Visszajelzés
Írjon visszajelzéstEl lugar es pequeño y acogedor, con muy buena comida y porciones adecuadas. La relación calidad-precio es perfecta. Fuimos a comer del menú (16,5€ por persona) y nos sirvieron la comida muy rápidamente. El camarero con gafas que nos atendió fue muy amable.
Muy buena elección, relación calidad/precio justificada y recomendado. Éramos dos personas y estuvimos buscando dónde comer durante un tiempo. Entramos en tres sitios anteriormente y uno de ellos tuvo un trato muy desagradable. Al final decidimos por este restaurante, por un precio de 16,50€ el viernes al mediodía. El menú era muy bueno y había muchas opciones tanto en la comida como en el postre. El café se paga aparte, aunque según entendí, si no quieres postre, puedes tomar café. La razón por la que te doy esta nota es por el espacio, es decir, la comodidad. El lugar es pequeño y comparte zona de bar con mesas asignadas para comer. Por otro lado, las sillas no tenían respaldo, lo cual no es nada serio, pero con las chaquetas se hizo complicado tener que escuchar a otro para apoyarlas. Si eliminamos esa parte y valoramos la comida, era buena. Para entrar en detalle y bajo mi opinión: salpicón especial de la casa 8/10, espaguetis a la carbonara 7/10, entrecot 7/10, ensalada de queso de cabra 7/10.
A pesar de ser domingo y de que la calle estaba concurrida con los establecimientos llenos, fue aquí donde nos recibieron y nos alimentaron. Es un bar típico de pintxos y tapas. El trato fue muy agradable, con productos de calidad y una buena presentación. Sin duda, para repetir.
El menú de fin de semana es muy bueno (16'5 euros). Las cantidades son suficientes y la calidad es buena. El escalope casero que elaboran es excelente. La ubicación del lugar es muy céntrica. Personal muy amable. El vino de la casa es mejorable. Relación calidad-precio excelente.
Genial! Y el camarero nos hizo el rato muy agradable, muy simpático! Las tapas genial