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Írjon visszajelzéstMi pareja y yo nos alojamos 4 noches y en cuanto abrimos la puerta de acceso a la casa nos quedamos alucinados. Una casa rural idílica, a la vez que totalmente equipada y llena de detalles que hacen que rápidamente desconectes de cualquier tipo de estrés, sintiendo como si estuvieras en casa pero en modo vacaciones. La casa te da una tranquilidad y una privacidad envidiable sin llegar a estar excesivamente aislada. Solo podemos agradecer al propietario el haber hecho posible esta experiencia, rápida contestación y amabilidad e interés porque todo salga a pedir de boca. E insisto una vez más, el nivel de equipamiento de la casa y detalle con los que Antonio te acondiciona el alojamiento es para repetir si o si.
Hemos pasado un fin de semana mi pareja y yo y el lugar es un auténtico encanto. Ideal para desconectar de todo y pasar unos días con unas vistas espectaculares y una paz y un silencio que no se encuentran en muchos lugares. Los anfitriones son super atentos y están disponibles y dispuestos a ayudar en todo momento. Repetiremos sin lugar a duda.
“No es oro todo lo que reluce” Sin habernos mandado unas normas previamente, el penúltimo día de nuestra estancia y tras haber recibido visitas, nos mandan un mensaje en el que nos dicen que las visitas están prohibidas que han visto varias visitas e incluso la duración de las mismas, nosotros nos quedamos helados y miramos a todos lados..te vigilan en todo momento...de tranquilidad nada, nos fuimos inmediatamente.
Un lugar mágico, lleno de tranquilidad y con todas las comodidades necesarias para relajarte y disfrutar del lugar y su entorno. Sus anfitriones muy amables, atentos y a la vez te mantienen tu intimidad.
Sitio perfecto para desconectar,, zona de ocio para compartir con familiares y amigos, muy cómodas las habitaciones